Si el mundo negara, Mujer, tu presencia
que mi alma cintila con besos de luna,
será la inviolable voz de mi conciencia
que amorosa afirme: ¡Como Tú, ninguna!.
Y, es que en mi cielo eres fulgor de lucero
que enciende horizontes de inmensa fortuna,
y por tu cariño que tanto venero
con pasión pronuncio: ¡Como Tú, ninguna!.
Sé que mi alegría nace de tu risa
por eso tu nombre, mi voz eterniza ..,
reiterando siempre: ¡Como Tú, ninguna!.
Cuando en nuestras vidas, la senda se acabe
quedará ese canto, que tu ser alabe
y amante repita: ¡Como Tú, ninguna!.
Prof. Dr. Litt.
Manuel S. Leyva Martinez
2 comentarios:
Dr. Leyva Martinez, que honor para la vista este poema. Muchas gracias.
Stefania
realmente es un honor del cual no me atrevo a comentar,temiendo quedar corta en su apreciacion´simplemente,¡¡una belleza!!gracias Dr Leyva..Normy
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